Mercedes-Benz y otra generación para este SUV
La nueva generación del Mercedes-Benz GLB inaugura una etapa estratégica para la marca alemana, que apuesta por un SUV compacto eléctrico con mayor habitabilidad, arquitectura digital de nueva generación y un planteo orientado al uso familiar intensivo.
El Mercedes-Benz GLB surge como una pieza central de la estrategia eléctrica de la firma, que pretende conquistar un público familiar que demanda vehículos amplios sin migrar a categorías superiores.
La propuesta se presenta como un híbrido conceptual entre formato urbano y enfoque de viaje, con especial atención a la modularidad interior y a la gestión inteligente de autonomía.
Estética renovada y presencia específica para uso familiar
El diseño exterior adopta proporciones más sólidas que enfatizan una imagen robusta. La presencia de pasos de rueda contundentes y una resolución frontal dominada por un nuevo tratamiento lumínico generan una identidad propia dentro del conjunto de SUV compactos.
Así las cosas, Mercedes eligió diferenciar esta generación mediante una estética que mezcla elegancia con un espíritu aventurero moderado, sin caer en extremos off-road, pero sin renunciar a una imagen dinámica.
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Parte de esa modernización se manifiesta en el equipamiento del techo panorámico, que contribuye a la sensación de amplitud interior.
Opciones como el sistema inteligente que permite oscurecer o aclarar el cristal añaden una dimensión tecnológica vinculada al confort visual y térmico durante trayectos prolongados.
Un interior concebido para familias y uso cotidiano de largo alcance
El desarrollo de la nueva plataforma prioriza la habitabilidad interna. La longitud cercana a los 4,73 metros, el ancho superior a los 1,86 metros y una distancia entre ejes que roza los 2,89 metros explican la ganancia de espacio disponible en las dos primeras filas.
El incremento se percibe de forma evidente en la zona posterior, donde los pasajeros disponen de mayor margen para piernas respecto del anterior modelo eléctrico de similar tamaño dentro de la marca.
A su vez, e Mercedes-Benz GLB puede configurarse con cinco o siete asientos, característica poco común en SUV eléctricos compactos.
La modularidad interior se complementa con un asiento posterior desplazable longitudinalmente, que permite optimizar el espacio en función del número de pasajeros o del volumen del equipaje.
Primeras versiones eléctricas
Sobre el Viejo Continente, lhará su debut en los primeros meses del año venidero. Incluye dos variantes eléctricas, GLB 250+ y GLB 350 4MATIC, ambas equipadas con tecnología EQ y batería de alta capacidad.
Más adelante aparecerán versiones híbridas que permitirán ampliar el espectro de precios y generar un puente tecnológico con usuarios que aún no están preparados para la transición total a la electricidad.
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Esquema motriz, rendimiento y gestión energética
Las cifras oficiales indican que el GLB 250+ alcanza alrededor de 200 kW de potencia y logra un rango cercano a los 631 kilómetros en condiciones de homologación WLTP.
La versión 350 4MATIC, por su parte, incrementa la potencia hasta aproximadamente 260 kW e incorpora tracción integral.
Ambas versiones utilizan baterías NMC con capacidad útil próxima a los 85 kWh. La estructura eléctrica de 800 V constituye uno de los avances más relevantes, ya que facilita cargas rápidas a potencias muy elevadas.
Ecosistema digital y evolución de la interfaz MBUX
Uno de los elementos que distingue al Mercedes-Benz GLB es la adopción de la plataforma MB.OS como núcleo operativo. Esta arquitectura informática funciona como base para un conjunto de servicios conectados que incluyen actualizaciones remotas, ampliaciones de funciones y personalización avanzada.
La interfaz MBUX, ahora completamente renovada, incorpora tres pantallas integradas sobre un panel continuo que centraliza información de conducción, navegación y entretenimiento.
La incorporación de inteligencia artificial generativa marca un punto de inflexión en la experiencia de uso, ya que ofrece interacción conversacional contextual, órdenes de voz enriquecidas y asistencia predictiva.
Seguridad, asistencia y funciones avanzadas de supervisión
La dotación tecnológica en materia de seguridad incluye un conjunto de cámaras, radares y sensores distribuidos en distintos puntos, asistidos por un procesador de alta capacidad refrigerado por líquido.
Esta solución técnica permite implementar funciones avanzadas de asistencia y deja la puerta abierta a evoluciones mediante actualizaciones remotas. El vehículo dispone de modos específicos para conducción en caminos irregulares, que gestionan la tracción, la dirección y la respuesta de los frenos para situaciones de baja adherencia.
