Jaguar F-Type, un deportivo que esquiva la crisis
El flamante deportivo de la casa británica se ofrece en el país con un motor V8 que es capaz de desarrollar una potencia máxima total de 495 caballos de fuerza.
A pesar de la fluctuante realidad que vive el mercado automotor argentino a causa del pasado impuestazo; Ditecar, importadora en el país de las marcas Volvo, Jaguar, Land Rover y Range Rover; sorprendió al sumar a la oferta local al F-Type, un deportivo biplaza británico que se venderá a pedido y con valores que superan los 400.000 dólares.
Aunque varias automotrices se estén replanteando la vigencia de su catálogo actual y hasta, porqué no, su permanencia en el país; Jaguar parece hacer oídos sordos a la economía nacional con este lanzamiento, que ¿reaviva? la competencia ante el Audi R8 Spyder, el Porsche 911 Cabrio y el Mercedes-Benz SLK.
Sin dudas todos estos ejemplares son integrantes de un segmento premium de verdadera exclusividad, dado que son contados con los dedos de una mano los individuos capacitados en Argentina para desembolsar una gran suma de dinero en dólares, y sin tener reparos por la cantidad de justificaciones, investigaciones y polémicas que esto implica.
Fuera de esta discusión, no hay que perder de vista que estamos en presencia de un deportivo mundialmente reconocido. Fiel a su segmento de lujo, este novedoso ejemplar para el ámbito local cuenta con una elegante estética que está conformada por una estructura musculosa constituida mayormente en aluminio rígido y ligero a la vez. Además de las líneas modernas y aerodinámicas que se reparten por toda la estructura, en el frente se destacan la nueva y angulosa parrilla, los faros bi-xenón y las luces de diurnas LED integradas. Las llantas de 20 pulgadas rematan la atractiva apariencia.
La cabina, donde hay espacio para dos personas, está orientada hacia el conductor; tal es así que el uso de diferentes materiales a ambos lados del habitáculo aporta una diferenciación adicional, con un acabado más técnico en el lado de quien conduce.
En su arribo al país, sólo se ofrece la versión equipada con un motor V8 de 5.0L S que desarrolla una potencia máxima de 495 CV y 625 Nm. De manera conjunta trabaja una transmisión automática Quickshift de ocho velocidades que hace traccionar a la zona trasera. El paso de 0 a 100 km/h se da en sólo 4,3 segundos y la velocidad máxima está limitada electrónicamente a los 300 km/h.
Vale destacar que los opcionales son los encargados de hacer subir aún más el valor final. La garantía, por su parte, es de tres años o 100 mil kilómetros.