Audi colocó la primera piedra de su Planta en SJC
El flamante centro industrial de la firma de los cuatro aros prevé la producción de la próxima generación del Q5 cuando se ponga en marcha a mediados de 2016.
Más allá del acto simbólico por la colocación oficial de la primera piedra de lo que será la planta en San José Chiapa, en el estado de Puebla, esta ceremonia representa al inicio de las obras de construcción de la primera fábrica de automóviles exclusiva de Audi en el continente norteamericano.
Esta planta, que se ubica a 2,400 metros sobre el nivel del mar y que dispone de una superficie de 400 hectáreas, se erigirá hasta mediados de 2016 y tendrá una capacidad de producción anual de hasta 150,000 vehículos. En los próximos dos años se construirán una sede de construcción de carrocerías, un taller de pintado, una zona de montaje e incluso un nuevo taller de prensado.
Los 900 millones de euros de inversión que demanda la creación de este centro industrial darán “un impulso decisivo al crecimiento global de la marca; en el futuro, el Audi Q5 se distribuirá desde aquí a todos los países del mundo”, afirmó Rupert Stadler, Presidente del Consejo de Dirección de AUDI AG.
Junto a Stadler, se hicieron presentes sus colegas del Consejo de Dirección, Frank Dreves, Bernd Martens y Thomas Sigi; del Secretario de Economía de México, Ildefonso Guajardo Villarreal, del Gobernador Constitucional del Estado de Puebla, Rafael Moreno Valle, y del Alcalde de San José Chiapa, Filogonio Vargas Torres.
En el momento en que Audi decidió instalarse en México hubo varios factores que inclinaron la balanza hacia el territorio Azteca, tales como una economía floreciente, la buena ubicación en el mapa (está pegado a Estados Unidos y cerca de los mercados sudamericanos), una infraestructura bien desarrollada y, sobre todo, la gran cantidad de tratados de libre comercio internacional que ofrecen mejores condiciones fiscales y financieras.
Al mismo tiempo que se realizó el acto de la colocación de la primera piedra, también se llevó a cabo un congreso de proveedores del cual participaron 150 empresas de ámbito internacional. De por sí, la nueva planta generará 3,800 puestos de trabajo directos, aunque se estima que el efecto sobre el nivel de empleo de la región será la creación de 20,000 puestos de trabajo más de forma indirecta.
