Test: Volkswagen The Beetle 2.0 Sport

Único, distintivo e icónico, todos estos adjetivos caben a la perfección con el Volkswagen The Beetle. Una combinación exacta entre el diseño deportivo y el poderoso motor de 211CV.

Pruebas | conduciendo | 05/01/2015 | Compartir

Creo que no hay persona que ame a los autos que niegue que el “Escarabajo” es un vehículo que va a ser recordado por la industria. La primera generación rompió el mercado y perduro durante varias décadas. La segunda, que fue novedad en el Salón de Detroit de 1998, fue una reinterpretación del diseño del modelo anterior y marcó el regreso del icónico vehículo. Y ahora llegó la tercera generación, denominada The Beetle que toma líneas más atrevidas con rasgos de Porsche y se comercializa con la “mágica” combinación del motor de 211 caballos de potencia y la transmisión automática DSG.

Para comenzar creo que es conveniente hacer referencia a los grandes cambios que tuvo en cuanto a diseño. Exteriormente toma una línea más deportiva con una reducción considerable de su altura y el crecimiento de sus dimensiones (15 cm más largo y 8cm más ancho). Toda la línea exterior tiene un tratamiento atlético con faldones, alerón, doble salida de escape, molduras en los laterales y llantas de aleación deportivas de 17 pulgadas.

Motor de 211 caballos de potencia y caja DSG[/caption] El interior mantiene las líneas de todos los modelos de la marca. Por ese motivo, la consola central tiene el sistema de audio habitual e incorpora la pantalla táctil con buena respuesta, pero sin navegador que está disponible como opcional. El instrumental tiene tres relojes -uno grande y dos pequeños- con buena visibilidad. En el display central del velocímetro tiene la computadora abordo donde se puede ver un nivel de información del vehículo completo.

En cuanto a las comodidades, la posición de manejo es buena -algo deportiva- con doble regulación para el volante y con el ajuste manual de la butaca en altura y profundidad. El problema surge en las plazas traseras que sufren los mismos problemas que la mayoría de los modelos coupé de todas las marca. Son sólo dos plazas que están bastante ajustadas tanto en altura por la caída del techo como en espacio para las piernas. Además, el ingreso no es de lo más cómodos. En definitiva, en tramos cortos pueden viajar dos adultos pero con el paso de los kilómetros seguramente van a empezar las quejas. No está exclusivamente pensado para los niños, pero las plazas traseras son ideales para ellos.

Por último, algo que mejoró mucho con respecto a la generación anterior es el baúl que ahora tiene 310 litros. Gran parte de la ganancia de ese espacio se debe a que no tiene rueda auxilio y trae un kit de inflado provisorio que en caso de un pinchazo se puede transitar -con suma tranquilidad- hasta la gomería más cercana.

El interior mantiene la línea de la marca[/caption] Llamativamente en el interior no tiene plásticos blandos, pero a pesar de ello la calidad es buena. La plancha de abordo tiene un simil fibra de carbono para darle un toque deportivo y los encastres son de alta calidad. Acostumbrado a los modelos de construcción MERCOSUR, el The Beetle que llega de México está muy por encima en cuanto a calidad.

Hay pocas combinaciones que me gusten tanto como la que logran el motor de 211 caballos de potencia de Volkswagen y la transmisión DSG. Este versión Sport, tope de gama, dispone del ya mencionado impulsor TSI con la caja automática DSG de seis marchas -hubiese preferido la de siete cambios, aunque esta no está nada mal-. Cada vez que pisé el acelerador el auto respondió a lo que le pedía. La entrega adicional de potencia que ofrece el turbo hace que el vehículo tenga resto tanto a baja como a alta velocidad. Para completar las ambiciones deportivas de esta variante, la transmisión tiene la posibilidad de elegir el sistema Sport que pasa los cambios en revoluciones más altas y le da unas prestaciones deportivas asombrosas.

Ha mejorado con respecto al confort de marcha[/caption] Con respecto a la generación anterior, ha mejorado mucho en el confort de marcha. A pesar de no tener una gran distancia entre ejes (2537cm), la suspensión independiente en todos los ejes hace que no marque tanto los defectos de las calles y las rutas. Asimismo, a alta velocidad cuenta con el control de estabilidad que corrige cualquier tipo de error. Puede alcanzar los 225 kilómetros por hora. En el transito en ruta, a unos 120 kilómetros por hora, el motor está en las 2500 revoluciones por minuto en sexta marcha y hace que se viaje confortablemente y encima ayude a tener un consumo de combustible moderado. Los números indican que en el extraurbano está en poco menos de nueve litros cada cien kilómetros. Logicamente en ciudad asciende y supera los once litros en las misma distancia recorrida.

El equipo de confort es realmente completo. Entre tantos atributos, se puede destacar el techo retráctil con apertura, los tapizados de cuero, los sensores de estacionamiento delanteros y traseros, el volante multifunción, los faros bi-xenon, el control crucero, el equipo de sonido con audio streaming y el climatizador automático. –ver ficha técnica

Su valor está afectado por el impuesto a los bienes de lujo[/caption] En cuanto seguridad, no sólo la variante Sport tiene un gran equipamiento sino toda la gama. Esta versión ofrece seis airbags (delanteros, laterales delanteros y de cortina), sistema de frenos ABS (antibloqueo), EBD (distribución de la fuerza del frenado electrónicamente) y asistencia al frenado de emergencia (BAS), Control de estabilidad (ESP) y de tracción (TCS), antiniebla delanteros y traseros y Ganchos ISOFIX para ajustar silla de niños. –ver ficha técnica

Como a varios de los modelos “premium” que se comercializan en el país, el The Beetle Sport está alcanzado por el Impuestazo y el precio que informa Volkswagen es de $407.189-. Un número dificil de explicar en este tipo de vehículos pero el que quiera esta versión tendrá que soportar el bendito impuesto. Para poder “esquivar” semejante aumento habrá que conformarse con la variante más económica con el motor 1.4 y la transmisión manual. Sacandome de la cabeza el valor, el Volkswagen The Beetle Sport es un modelo que cumple con todos los requisitos para las personas que buscan una distintiva coupé deportiva. Potencia, diseño y confort, en un sólo vehículo.