Test: Fiat Linea 1.8 Dualogic

A pesar de no ser uno de los modelos más vendidos de la marca italiana, el Linea tiene características acordes al segmento. Equipa motor de 1.8 litros y 130 cv y caja automatizada Dualogic.

Pruebas | conduciendo | 07/06/2015 | Compartir

Con la explosión de las ventas de automóviles hace unos años, todos los segmentos empezaron a tener una cantidad de vehículos que antes no se veían en el mercado argentino. Uno de los que más incorporó fue el de los “sedanes C” con la llegada del nuevo Ford Focus, el Chevrolet Cruze, el Citroën C4 Lounge y el Toyota Corolla.

Pese a los grandes cambios que tuvo el segmento, Fiat continua con el conocido Linea pero con algunas pequeñas modificaciones en su exterior e interior. Por debajo en tecnología, seguridad y estética -algo antigua-, el producto de la casa italiana sigue teniendo sus puntos fuertes para competir contra los grandes referentes del mercado.

En Argentina sólo se comercializa con la motorización E-Torq de 16 válvulas y 1.8 litros que desarrolla unos 130 caballos de potencia. Es un impulsor suave y progresivo. Desde bajo régimen hasta las 3500 rpm siempre tiene una respuesta aceptable en aceleración. Puede alcanzar una velocidad máxima 185 kilómetros por hora.

La mecánica se completa con la transmisión automatizada Dualogic. Su comportamiento es totalmente diferente en ciudad que en ruta. En el tránsito citadino, con muchos cambios, se sienten demasiado los tironeos de los pasos de marcha. En ruta es diferente, porque generalmente uno va en la máxima marcha y solo se rebaja ante un eventual paso a otro vehículo, y es ahí donde las paletas que posee detrás del volante juegan un papel importante porque con un simple toque al módulo izquierdo se baja un cambio y se puede pasar fácilmente.

Esta combinación le da un buen confort de marcha en ciudad y correcto en ruta. Por supuesto, debido a su motorización y su transmisión no es de los más deportivos del segmento. Además, ante algunas curvas a alta velocidad, el Línea se inclina más de lo debido. Su consumo está dentro de la media habitual de estos vehículos. En ruta gastó unos 8,4 litros y en ciudad unos 10,5 litros, ambos cada cien kilómetros.

En cuanto a su estética, con respecto al modelo anterior ha cambiado los paragolpes delanteros y traseros, sumó una nueva parrilla frontal y una nueva tapa de baúl que ahora porta el nombre del auto. Además, hay una mayor presencia de terminaciones cromadas. Sin juzgar lindo o feo, creo que el Linea se quedó algo retrasado con respecto a todos sus competidores.

Su interior también cambió con un nuevo panel frontal, colores combinados, renovada serigrafía del tablero, iluminación del instrumental en blanco y tecnología LED para iluminar el ambiente. A su vez, tiene un nuevo sistema de audio integrado al panel con un diseño más moderno y la tecnología Blue & Me.

A pesar de tener doble regulación para el volante y la butaca, la posición de manejo es cómoda, aunque siempre es alta. Lo que realmente me sorprendió es la buena terminación y encastres de los materiales (la mayoría plásticos duros). Otro punto favorable es la buena insonorización del habitáculo.

Tanto los pasajeros delanteros como los traseros tienen una habitabilidad correcta. El conductor y acompañante tienen espacio de sobra. Asimismo, en la parte trasera dos adultos de estatura promedio pueden viajar cómodos con lugar para las piernas y la cabeza (defecto de varios de sus competidores).

Este modelo tope de gama cuenta con un correcto equipo de confort pero no hay nada que sorprenda. Dentro de lo más destacado se puede nombrar el cuero para las butacas y el volante multifunción, el apoyabrazo delantero, el control de velocidad crucero, el climatizador automático y el encendido automático de limpiaparabrisas y luces. También cuenta con los sistemas básicos como: los alzacristales con one touch, la dirección asistida y la alarma antirrobo.

En seguridad creo que está lejos de sus rivales. Principalmente porque no tiene uno de los sistemas más importantes para la ayuda de conducción, el control de estabilidad. Después incorpora seis airbags (opcional), frenos ABS (antibloqueo) con EBD (distribución de la fuerza del frenado electrónicamente) y asistente sonoro para el estacionamiento.

En conclusión, ante tanta renovación del segmento el Linea parece haberse quedado un poco en el tiempo. Esto no quiere decir que no sea un producto totalmente confiable y con las características básicas del segmento, pero creo que no tiene ninguna cualidad que sea superior a las que tienen sus competidores. Por supuesto, comercializado a unos $257.030-, es el modelo tope de gama más económico de la gama.

Aúno no hay ninguna información oficial sobre la renovación de este modelo. Hace sólo unos meses, se presentó el Fiat Aegea en el mercado mundial que podría ser un gran reemplazo.