BMW renueva su buque insignia y agrega la variante eléctrica
BMW presenta por partida doble la nueva generación del Serie 7 pero también se despacha con su alternativa cero emisiones i7.
El día ha llegado para el nuevo i7 otro modelo eléctrico que se agrega a la plantilla pero que es acompañado por el renovado Serie 7.
Desde el sector delantero estas opciones añaden el estilo de diseño del SUV x7. Grandes riñones y luces estiradas se complementan con un voluminoso paragolpes. Respecto del vehículo eléctrico, y como es común en la casa bávara, adhiere apliques en azul.
Sobre la zaga se han modificado los grupos ópticos que se muestran más estilizados junto a un paragolpes que aporta musculatura.
A bordo el BMW Serie 7 y el i7 despliegan lo último disponible en el ramo tecnológico. El sistema Live Cockpit Plus y el mecanismo iDrive 8 se visualizan sobre la pantalla de 14,9 pulgadas central y unida junto a otra perteneciente al tablero digital de 12,3 pulgadas.
Las plazas traseras podrán disfrutar de forma opcional del Theater Screen con 31,3 pulgadas y una resolución 8K. Este dispositivo se encuentra instalado sobre el techo e imita a una pantalla de cine. Además incluye un sistema de sonido premium con 18 parlantes.
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En cuanto a la conducción los BMW Serie 7 y el i7 incorporan el nivel Plus 2 que permite conducir sin las manos en el volante. También nos encontramos con el eje trasero direccional y suspensión adaptativa, entre otros.
Por otra parte, la mecánica eléctrica (xDrive 60) equipará dos propulsores eléctricos que desarrollan en común unos 544 caballos de fuerza. La tracción es integral y la batería asignada de 101,7 kWh permite recorrer entre unos 590 y 650 kilómetros.
Con todo este menú acelera de 0 a 100 km/h en 4,7 segundos y logra los 240 km/h de velocidad máxima.
Respecto de las variantes convencionales el Serie 7 aparecen las opciones de gasolina 740i y 760i con propulsores de seis u ocho cilindros.
El 750e xDrive y el M760e xDrive esconden el motor 3.0 litros de gasolina junto a un sistema eléctrico de 200 CV. Así el caballaje conjunto es de 490 y 571, respectivamente.
Por último el diésel utiliza un bloque 3.0 litros con un mecanismo eléctrico de 48 V. Unos 300 CV son los encargados de empujarlo.
Todos ellos equipan la tracción total y una transmisión automática de ocho relaciones.
