Mercedes-Benz SL 63 AMG 2012

La firma alemana lanza la flamante versión de este roadster de alta gama con mejoras en su consumo y peso.

Sin categoría | conduciendo | 24/02/2012 | Compartir

El Mercedes-Benz SL 63 AMG contiene al poderoso motor V8 de 5.5 litros biturbo que desarrolla 537 CV. Si el comprador se ve interesado en más poder, puede optar por instalar el AMG Performance package que aumenta el caballaje hasta los 564 CV. Con el propulsor convencional, alcanza los 100 km/h en 4.3 segundos y desarrolla una velocidad máxima de 251 km/h. A su vez, con el paquete de optimización sus cifras se potencian hasta los 4.2 segundos y las 301 km/h (en ambos casos la velocidad está limitada electrónicamente). La planta motriz lleva acoplada una transmisión AMG Speedshift MCT deportiva de siete velocidades que cuenta con cuatro modos de manejo: C (Controlled Efficiency), S (Sport), S+ (Sport Plus) y M (Manual).

Gracias a una serie de innovadoras tecnologías, se pudo conseguir un consumo de combustible un 30 por ciento menor que el de la versión anterior. Los técnicos desarrollaron el cuerpo del SL 63 con materiales súper ligeros tales como el aluminio y la fibra de carbono en la carrocería. Esta disminución de peso de 125 kg influye de manera radical en el ahorro de combustible; Además mejora la rigidez, la seguridad y el confort.

La suspensión deportiva del SL 63 AMG está basada en el sistema Active Body Control y hace hincapié en la búsqueda de un manejo dinámico y una gran performance. La misma puede ser modificada según la necesidad del conductor, ofreciendo mayor confort o respuesta. El sistema de frenos de alto rendimiento está presente en la configuración estándar y el Performance Package agrega frenos cerámicos.

Su línea exterior presenta una parrilla con diseño agresivo que es acompañada por aletas y numerosas entradas de ventilación. El conjunto es rematado por una cuádruple salida de escape, faldones, spoiler, faros de LED, techo removible que tarda 20 segundos en quitarse y llantas de 19 pulgadas.

Por dentro se aprecian butacas de piel climatizadas, un panel deportivo e iluminación interior especial; todo esto enmarcado en unos acabados premium. Entre el equipamiento aparece un gran número de sistemas de seguridad que lo convierten en el roadster más seguro del mercado (sistema pre-colisión, sensores de cambio de carril y visión de puntos ciegos entre muchos otros), también cuenta con pantalla de navegación, reproductor de DVD y un sistema de sonido premium entre numerosas variantes que permiten personalizar el equipamiento.

El Mercedes-Benz SL 63 AMG 2012 mantiene su estilo sin dejar de lado su esencia y deportividad.