VW Passat R36

El Passat más deportivo hace su presentación vestido de gala pero con un corazón deportivo.

Sin categoría | conduciendo | 07/12/2006 | Compartir

El nacimiento se produce en la década del setenta cuando la directiva de Volkswagen decide que un modelo que acompañe al Beetle sería prudente. Si bien la gama VW ya era amplia, el lanzamiento del Passat en 1973 abrió un universo completamente nuevo para la empresa de Wolfburgo. El primer modelo tenía un motor de 90 hp que lo impulsaban por encima de los 135km/h. El propulsor entregaba mucha agilidad y potencia en bajo régimen.

Los años y las millones de unidades se continuaron, hasta que en 1991 se decidió que era necesario resaltar la imagen deportiva: El VR6 había llegado. Con un potente V6 de 194 hp las prestaciones de la familia VW (el motor fue equipado para el Passat tanto como para el Golf) eran supremas. Pero el fuerte crecimiento de Audi marcó que VW pase a ser una empresa con un perfil más sobrio, por ellos las versiones deportivas se discontinuaron. En 2001 con la quinta generación en pleno asenso el W8 irrumpió con violencia para alegrar a los miles de fanáticos que ansiaban poder en el pie derecho. El motor en aquella ocasión en uno de ocho cilindros en W y generaba 275 hp. La estética se mantenía tan elegante y seria como siempre, pero las reacciones y el comportamiento eran excelsas. 0 a 60 en menos de 7 segundos y 155 millas de velocidad máxima.

Hoy el Passat posee una diversidad mecánica envidiable y culmina con el R36. Este modelo puede ser solicitado con las dos carrocerías clásicas: rural o sedan de cuatro puertas. En el exterior solo las llantas de 18 pulgadas o los tubos de escape hablan del inmenso poderío que encierra este automóvil. En el interior las bucatas se adaptan a las prestaciones de ensueño y contienen mejor la espalda. Como equipamiento no añade casi nada interesante; de hecho el Passat es un modelo que se caracteriza por incluir los últimos adelantos a precios muy asequibles.

Pero lo distintivo de esta supersónica versión es el motor: se trata del mismo ya presentado en las SUV Audi Q7 y VW Touareg, pero aquí entrega indomables 300 hp. Es impulsor de 6 cilindros ubicados en V a 10 grados y 3.6 litros utiliza la tecnología FSI de inyección directa de combustible, lo que garantiza una respuesta casi inmediata en casi toda la franja de revoluciones. La potencia la transmite al suelo mediante el conocido, probado y confiable sistema 4 Motion. Este posee un embriague multi disco que une ambos ejes cuando la falta de potencia se descubre. Unido a este complejo sistema de tracción va montada la excepcional caja secuencial pilotada de doble embriague DSG. Con levas detrás del volante, la conducción es una aventura en cada curva y un placer cuando la carretera abierta permite exprimir todo el potencial. Si bien el comportamiento de la familia Passat se caracteriza por la suavidad y el silencio, este modelo es la excepción que alegra a muchos. No es de extrañar que el cliente del R36 sea completamente distinto del que adquiere un 2.0 TDI.

Por las prestaciones compite con un BMW 335 de 306 hp, un Audi S4 de 344 hp o un Volvo S60 R de 299 hp. El Passat no se queda atrás y acelera hasta las 60 millas en el mismo tiempo que sus contrincantes aquí expresados: 5.7 segundos.

Aquel que se decante por el Passat R36 tendrá lo que busca: potencia, sobriedad, y sobre todo excelencia mecánica.