GM busca eliminar los solventes
A través del uso de una nueva tecnología, la automotriz estadounidense busca contrarestar el uso de sustancias que generan un elevado grado de contaminación.
Con la intención de reducir las emisiones contaminantes en los procesos de producción, General Motors comenzó a utilizar un tratamiento por medio de flameado que permite que la pintura se adhiera a las piezas de plástico del vehículo, como instrumentos y páneles de las puertas, sin utilizar base que contiene solventes.
Si bien GM demostraba su compromiso con la reducción de contaminación administrando los solventes tradicionales mediante el reciclaje, la conversión a energía y el sobrecalentamiento de gases, estos procedimientos generaban un elevado costo. Sin embargo, la tecnología de flameado no sólo mejora la eficiencia siendo más rápido que aplicar la base con atomizador, sino que además el gasto del capital se amortiza en menos de cuatro meses.
Según explican desde la marca, este novedoso procedimiento utiliza un sistema robótico de eficiencia de energía para crear un cambio molecular en la superficie del plástico, haciendo que se adhiera con la pintura, por lo que se elimina la necesidad de una base promotora de adhesión.
Hasta el momento se ha utilizado está técnica en los Chevrolet Cruze, Sonic y Volt. Los resultados obtenidos fueron una disminución de los residuos sólidos y líquidos (filtros, limpiadores, solventes y pinturas) de 48 toneladas al año a menos de una, reducción de los contaminantes del aire de 810 a 80 toneladas al año, y la eliminación del vertido de residuos como lodos de pintura y materiales de desecho pintado de 25 toneladas a cerca de cero.
Sin dudas, un gran avance que favorecerá los bolsillos de la marca y que, principalmente, cuidará el medio ambiente.