El pequeño deportivo se vuelve más poderoso
Con esta actualización, el Toyota GR Yaris nipón adquiere mayor potencia y opcionalmente una transmisión automática, más allá de su estética revisada.
Toyota comienza el este nuevo año con una renovación esperada. El GR Yaris presenta una evolución respecto a su antecesor en varias facetas.
Claro que la más interesante para un vehículo deportivo es la mecánica. Allí los técnicos nipones han puesto manos a la obra para exprimir el motor de tres cilindros y 1.6L turbo y lo han llevado a los 280 caballos de fuerza.
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Esto significa un incremento de 20 CV respecto a su antecesor gracias a una serie de mejoras sobre los pistones y el sistema de admisión, entre otros aspectos.
Ahora el Toyota GR Yaris, puede contar opcionalmente con una transmisión automática de ocho posiciones aunque continúa vigente y divertida la caja de cambios manual de seis marchas.
La tracción continúa con una arquitectura integral, junto a los diferentes modos de conducción y un dispositivo de frenos de alto rendimiento.
Más allá de ello, el Toyota GR Yaris cuenta con algunas alteraciones en el exterior con toques en paragolpes y un reposicionamiento de la luz de freno en la zona posterior, como más relevantes.
Una vez dentro, las modificaciones son un poco más profundas, con cambios en las posiciones de los espejos, asientos y pantallas para mejorar la visual. Algunos otros comandos se han reubicado para que estén al alcance de la mano. Se destaca la pantalla central orientada al conductor y al tablero digital de tintes deportivos con 12,3 pulgadas.
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Claro que también aparecen las insignias GR en los asientos de competición o el volante, más allá de las terminaciones en cuero, Alcántara y aluminio.
El Toyota GR Yaris se vuelve más potente y divertido para encarar el asfalto.
