Nueva generación para el Clase S de Mercedes-Benz
El Mercedes-Benz Clase S se presenta en sociedad totalmente renovado y con más tecnología que nunca.
El Mercedes-Benz Clase S siempre ha sido el modelo “punta de lanza” para desplegar los nuevos desarrollos que poco a poco se vuelcan a otros productos de la casa de la estrella.
Para esta ocasión, la receta se repite en el buque insignia con la llegada de su nueva generación.
Desde fuera, el Mercedes-Benz Clase S se muestra más estilizado y abandona su estilo señorial por algo un poco más deportivo.
Su frontal cuenta con la generosa grilla frontal, las tomas de aire en el paragolpes y unos faros más estilizados.
Ya para el el área trasera se perciben los remozados grupos ópticos y unas líneas más redondeadas que provienen del techo.
En su interior, la novedad más sobresaliente es el cambio en la disposición de la pantalla central que luego de ser alargada como una continuación del tablero digital (Clase A o Clase E), será ubicada de forma vertical.
Además, el Mercedes-Benz Clase S podrá contar con hasta 5 pantallas diseminadas por todo el vehículo.
Las mismas se sitúan en el cuadro de instrumentos digital, de forma central delantera, y para cada pasajero de la fila posterior.
Con ello hace su estreno el flamante sistema MBUX con la evolución en los dispositivos de reconocimientos por voz, reconocimiento facial o huella dactilar para mantener la seguridad y asignar los diferentes perfiles de los usuarios.
En tanto, el dispositivo Head-Up display con realidad aumentada que muestra la información en 3D se muestra como otro detalle particular.
Asimismo, estas pantallas pueden contar con tecnología OLED para una mejor definición y visualización.
Debajo del capó, el Mercedes-Benz Clase S ofrece varias alternativas de propulsión todas ellas de seis cilindros. Por un lado figura el diésel S350d y S350d 4Matic de 286 caballos de fuerza y S400d 4Matic de 330 CV.
Por otro lado, el S450 4Matic eroga unos 367 CV y el S500 4Matic alcanza unos 435 CV.
Todos ellos están asociados a una transmisión automática de nueve marchas, aunque en unos meses se espera la llegada de los propulsores V8 con un sistema híbrido suave de 48 voltios.
Otra novedad es su eje trasero direccional que optimiza su andar cuando hay que girar a bajas u altas velocidades.
La seguridad y la conducción autónoma estará desplegada a nivel 3 y se espera que llegue a nivel 4 con un mecanismo aún más preciso que puede aplicarse a situaciones más complejas.
El Mercedes-Benz Clase S ya está listo para mostrar todo su esplendor.