Un Mercedes de 1955 fue el ganador de Autoclásica 2015

Finalizó la decimoquinta edición de Autoclásica, una de la muestras de la industria automotriz más emblemáticas de Sudamérica.

Sin categoría | conduciendo | 13/10/2015 | Compartir

La primera vez que estuve en Autoclásica me quede impresionado por el nivel de vehículos que había en todo el Hipódromo de San Isidro. A medida que fueron pasando los años me fui enamorando cada día más de este «anticuado» show de autos que tomó trasendencia a nivel continental y se transformó en una cita obligada para los amantes del mudno motor.

Como todos los años, el broche final fue la entrega de premios por categoría y la resolución del Concurso «Best of Show» para motos y autos clásicos. Un Mercedes-Benz 300 SL 1955 fue distinguido por el jurado con el mayor premio de la muestra: «Best of Show Autoclásica 2015». A su vez, entre las motos la ganadora fue una Brough Superior 11/50 1938 de 1000 CC y de fabricación inglesa. Por su parte, un Triumph TR3 A 1960 fue el ganador del “Premio Germán Sopeña” como “Mejor Automóvil Deportivo Contemporáneo” de la muestra, por elección y votación de los periodistas que visitaron Autoclásica 2015.

El Mercedes-Benz 300 SL, conocido popularmente como “Alas de Gaviota”, es un deportivo de dos plazas fue producido entre los años 1954 y 1963. Se fabricó inicialmente con carrocería coupé, y luego también como descapotable. Fue distinguido por el jurado en virtud de poseer una singular belleza y armonía de sus líneas; mostrar una antigüedad suficiente que lo hace un verdadero clásico, su óptimo estado de preservación y restauración. El ganador conformó una terna final junto a un Packard Custom Coupe 1929 y un Bentley 4 1/2 Open Tourer.

Entre los stands, los premiados en esta edición de Autoclásica fueron: Motonetas Picantes (Premio mejor Stand de Club de Motos), Club Ferrari (Premio mejor Stand de Club de Autos); Los Monkeys (Premio mejor Stand de Autojumble); y Renault (Premio mejor Stand Comercial).

Este año se mostraron 600 automóviles de casi 60 marcas diferentes y celebraron los 60 años del Citroën DS, el Peugeot 403 y el BMW Isetta. El sector de competición recibió y rindió tributo a dos de los Torinos de la Misión Argentina en Nürburgring. Las motos clásicas estrenaron su exclusivo “Barrio de las Motos” con 300 ejemplares de calle y de competición; y con una exhibición especial de la Kawasaki Z1 900.

En el circuito de pruebas dinámicas el público pude disfrutar de las joyas mecánicas de cada categoría en acción, con la presencia de varias personalidades del mundo automovilístico. Los más chiquitos, pudieron participar del “Grand Prix Junior” que consistió en una divertida carrera de autos de época a pedal para niños de entre 4 y 6 años.

Organizada por el Club de Automóviles Clásicos de la República Argentina, Autoclásica es única en Sudamérica por la cantidad, calidad, variedad, singularidad y estado de presentación de los vehículos expuestos, cuidadosamente convocados y seleccionados para representar los mejores exponentes de cada época histórica.