DS se acerca a los Estados Unidos
Los planes de convertir a la marca en una firma premium de alcance global hacen que en el horizonte aparezca Norteamericano como un mercado muy tentador.
Si bien hace ya poco menos de un cuarto de siglo que las automotrices de origen francés no tienen injerencia dentro del mercado de los Estados Unidos, según las palabras de uno de los directivos del grupo PSA, existe una posibilidad muy certera de que DS comience a comercializar sus productos en América del Norte.
“Queremos hacer de DS una marca premium global, y no se puede ser global sin los Estados Unidos”, manifestó Yves Bonnefont, CEO de DS, en una conferencia durante el Salón Internacional de París 2014. Vale destacar que en esta muestra automovilística se presenta el Divine DS, un prototipo que comienza a marcar el camino de DS como firma independiente y separada de Citroën.
De acuerdo con los planes del Grupo, la idea es que DS se convierta en una división mundial y que tenga presencia en 200 ciudades grandes, incluyendo, 20 norteamericanas. Más allá de que la primera fecha tentativa para que este desembarco se produzca sea recién en 2020, Bonnefont dejó en claro que la decisión final no se tomará antes de 2017.
En la actualidad el abanico de modelos de DS se compone por el DS3, un pequeño hatch que conjuga trazados modernos con líneas de estilo retro; el DS4, otro compacto pero que prioriza las terminaciones más juveniles; y el DS5, un vehículo de cinco puertas y 178 pulgadas de longitud que se destaca por su apariencia y la posibilidad de contar con una propulsión híbrida de 200 caballos.
El último recuerdo que dejó una marca francesa en Norteamérica fue Peugeot en 1991, año en que se fue de Estados Unidos a causa del reducido número de ventas que llevaba. A causa de su procedencia gala, tanto Citroën como Peugeot y Renault comparten un estilo de diseño que nunca fue bien adoptado por los estadounidenses, quienes siempre priorizaron los vehículos robustos, de gran tamaño y con motores inmensos.
De todas maneras, y fuera de lo que es estética y apariencia, para que DS sí logre conquistar a los americanos del norte primero debe adecuar sus productos, dado que ninguno de ellos cumple con las normas federales de homologación locales.
El 2020 parece quedar lejos en el calendario, pero al pensar de que restan menos de seis años no parece demasiado, por lo que si el Grupo PSA tiene intenciones concretas de hacer global a DS pronto comenzarán a llegar las novedades de los futuros y novedosos ejemplares de la compañía.
