Bentley y un convertible muy especial
La marca británica revela al Batur Convertible artesanal desarrollado por Mulliner, que introduce el concepto “One plus One” y equipa la última evolución del motor W12 de 740 CV.
Presentado como una evolución conceptual del Batur Coupé, este modelo adopta la arquitectura de un Gran Turismo descapotable de altas prestaciones y la reviste de un diseño totalmente personalizado.
En el plano estético exterior, el Batur Convertible se presenta con un acabado Opalite, una pintura perlada capaz de reflejar matices cálidos y fríos según la incidencia de la luz.
Sobre este lienzo se traza una franja de competición en Beluga negro, perfilada por ribetes Mandarin, que recorre el capó, el airbridge y la cubierta trasera.
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El diseño respeta las proporciones clásicas de un Gran Turismo, con un largo capó delantero, una línea de cintura definida y una zaga robusta que integra de forma fluida el sistema de techo retráctil.
La ausencia de elementos superfluos refuerza la elegancia atemporal, mientras que los detalles aerodinámicos, discretos pero efectivos, garantizan estabilidad y eficiencia a alta velocidad.
Cada curva y cada superficie están trabajadas para transmitir la impresión de potencia contenida. El Batur Convertible no es un descapotable ostentoso, sino una pieza que equilibra la sofisticación con la presencia escénica, buscando el aplauso de los entendidos más que la atención superficial.
La principal innovación conceptual del Batur Convertible se encuentra en su interior, desarrollado bajo el nombre “One plus One”. En lugar de buscar una continuidad cromática uniforme, Bentley opta por una división estética radical: el puesto del conductor adopta un esquema Beluga negro, de carácter sobrio y concentrado, mientras que el lado del acompañante se viste en Linen claro, aportando luminosidad y contraste.
El vínculo visual entre ambas zonas lo proporciona un delicado trazo de color Mandarin, que se extiende de forma estratégica para unificar el conjunto sin anular la dualidad.
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Este planteamiento no es un mero recurso decorativo, sino una declaración de principios que reconoce la experiencia de conducción y la experiencia de viaje como dos vivencias complementarias pero diferenciadas.
A este enfoque se suman materiales seleccionados con criterios tanto estéticos como funcionales: cuero de origen sostenible, Alcántara de textura aterciopelada, inserciones de titanio mecanizado y maderas naturales tratadas a mano.
Cada elemento ha sido escogido tras un proceso de asesoramiento directo con el propietario, que incluye incluso la personalización de accesorios como las carcasas de las llaves o el set de equipaje a juego con el interior.
Bajo la superficie elegante y minimalista late la última y más potente evolución del motor W12 biturbo de 6.0 litros, capaz de desarrollar 740 CV.
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Esta mecánica, insignia de Bentley durante dos décadas, ha definido buena parte del carácter dinámico de la marca, gracias a su entrega de potencia lineal, su refinamiento y su capacidad para mover con autoridad carrocerías de gran tamaño.
Con el Batur Convertible, este propulsor alcanza su punto culminante y, al mismo tiempo, se despide del catálogo, ya que la compañía ha confirmado que su estrategia a medio plazo se centrará en soluciones híbridas y eléctricas.
Este cierre de ciclo dota al modelo de un valor simbólico añadido: no solo es un coche de producción limitada, sino también un testimonio tangible de un capítulo que no volverá.
En términos de rendimiento, el conjunto permite cifras propias de un deportivo de alto nivel, con una aceleración capaz de rivalizar con modelos más ligeros y una velocidad máxima que supera holgadamente la barrera de los 300 km/h.
Todo ello se gestiona a través de una transmisión automática de ocho velocidades y un sistema de tracción total que prioriza la seguridad sin sacrificar la emoción de conducción.
