Un tanque de lujo
La lumusina que traslada al presidente de los Estados Unidos en su visita a la Argentina es una verdadera fortaleza sobre ruedas con un diseño distinguido.
El presidente de los Estados Unidos siempre ha sido un foco de atención a nivel global. Esto hace que haya mucha que lo quiera y otra tanta que no. Por tal motivo, y para estar bien protegido, el actual mandatario estadounidense, Barack Obama, se traslada en su visita a la Argentina en un Cadillac muy particular.
Se trata de un vehículo conocido como La Bestia, que en realidad se llama Cadillac One. Y es el auto más seguro del mundo.
El auto fue fabricado por General Motors en Detroit y si bien luce como una limusina es verdaderamente un tanque.
La carrocería está blindada y puede resistir el impacto directo de bombas, granadas y disparos de francotiradores con puertas de 20 centímetros de grosor hechas en una aleación de acero, aluminio, titanio y cerámica. Todo el vehículo está herméticamente sellado para impedir la entrada de armas químicas. El chasis está reforzado con láminas de acero de 15 centímetros, y el tanque de combustible tiene una cubierta especial que evita una posible explosión en caso de impacto directo.
Pero La Bestia no es solo un espacio de protección. También está capacitado para atacar. Cuenta con cámaras de visión nocturna, un sistema de activación de bombas, armas automáticas y cañones que disparan gas letal.
Como ningún método es 100 por ciento infalible, el Cadillac One está equipado con una sala de emergencias en las que hay reservas de sangre compatibles con el presidente en caso de que se requiera una transfusión. También cuenta con tanques de oxígeno.
En el vehículo presidencial hay otra “bestia”. Se trata de su conductor, quien cuenta con un entrenamiento especial. El chofer fue capacitado por el Servicio Secreto de los Estados Unidos en conducción de emergencia, respuesta rápida, maniobras evasivas y cambios de rumbo de 180 grados. Como su seguridad es tan importante como la de su jefe, la cabina que ocupa esta reforzada con una puerta del grosor de un jet Boeing 757, que además impide el paso al asiento donde se encuentra el presidente.
Los neumáticos son «run flat» y están reforzados con kevlar, lo que significa que si se golpean, las llantas de acero balístico soportan el peso de 10 toneladas del coche.
En lo que a las características del auto se refiere, el Cadillac One está equipado con un motor diésel 6.5 que alcanza una velocidad de 96 kilómetros por hora. Acelera de 0 a 90 en 15 segundos, debido al peso del vehículo, y consume 29 litros cada 100 kilómetros.
Con esta fortaleza, Obama recorre las calles argentinas con la seguridad y el confort que necesita para sentirse como en su casa.