Toyota Camry 2010
La renovación hizo hincapié en la mejora uno de sus motores y en el avance del equipamiento de serie.
Para el mercado de los Estados Unidos, el Toyota Camry, no necesita ninguna presentación. Un viejo conocido que durante los últimos doce años, en once oportunidades ha sido el sedán más vendido. Contrario a ello, en Europa y en el resto de las regiones, no es un automóvil que haya sido galardonado y en algunos casos ni vendido.
El principal cambio que recibió el Camry 2010 con respecto a su antecesor es que ha mejorado el nivel de potencia de sus motores. Para las versiones LE y XLE, equipa un nuevo 2.5 litros de cuatro cilindros proveído con sincronización de válvulas variable con inteligencia (VVT-i) que alcanza lo 169 caballos de potencia con cambio manual o automático de seis marchas. El SE cuenta con el mismo impulsor pero ofrece una potencia de 190 CV.
Como tope de gama, para el rendimiento deportivo, está disponible un V6 de 3.5 litros que desarrolla 268 CV y 336 Nm de torque, asociado a una caja automática de seis marchas. La versión híbrida se mantiene con el motor eléctrico y un 2.4 litros VVT-i que generan en conjunto unos 187 CV y reducen el consumo hasta los 7.1 litros cada 100 kilómetros.
Los equipamientos de serie han mejorado con la inclusión de elementos como un nuevo equipo de sonido, con radio digital, CD, MP3 y entrada USB. También se renovaron el control de estabilidad VSC, el control de tracción TRAC y se agregó el acceso y arranque sin llaves.
Opcionalmente, se pueden elegir el sistema de cierre eléctrico de los retrovisores, el techo solar eléctrico, el tapizado de piel, el equipo de sonido JBL de 6 CDs, MP3 y Bluetooth o el navegador JBL que a todas las otras opciones la adiciona el reconocimiento de voz.
En cuanto al diseño exterior, no hubo grandes cambios. Se destacan los renovados parachoques, las ópticas traseras, algunos detalles en metal y la parilla delantera.
La marca japonesa presentó este modelo, con cambios en el equipamiento y en los motores, con el objetivo de continuar por la misma senda triunfal. ¿Serán suficiente para seguir dominando el mercado? El tiempo lo dirá.
