Test: Smart ForTwo Cabrio Passion
Con un rendimiento de consumo excelente y una suspensión no del todo acorde a las calles de Argentina, llega para insertarse en lo que será uno de los segmentos con más crecimiento en los próximos meses.
Probamos uno de los lanzamientos más rutilantes del mercado. El For Two Cabrio ha llegado al país para impactar en todos los sentidos. Con formas inusuales para la vista de los consumidores y un motor de 1.0 litros que consume alrededor de 4 litros cada 100 kilómetros, el Smart es el primer vehículo desarrollado totalmente para la ciudad que se comercializa en Argentina.
Este pequeño modelo busca ingresar en un mercado premium que hace tiempo lidera el MINI Cooper. Con diferentes dimensiones, cualidades, especificaciones y equipamiento que sus competidores, pero con otros grandes condimentos, el Smart For Two Cabrio es una nueva opción para los que quieren un automóvil distinto a todos los demás.
Diseño
Que sus líneas llaman la atención no caben dudas. Esto fue comprobado a la hora de la realización del test porque en todas las localidades donde nos deteníamos nos realizaban diferentes consultas.
Su exterior se define en una sola palabra, citadino. Este mensaje se transmite a la perfección en sus dimensiones y cualidades que dejan en claro que es un vehículo nacido y creado para transitar por las grandes congestiones de las metrópolis. Un único punto gris es la terminación de la capota de lona en los parantes traseros que al llegar a la esquina dificulta la visión.
Motor
Uno de los mejores ítems del vehículo. La mayoría de los usuarios que buscan comprarse un Smart saben que el consumo de combustible no es un problema a futuro. Con seis litros cada 100 kilómetros en ciudad y, con poco más de cuatro en el transporte interurbano, es uno de los autos con mejor rendimiento del mercado.
Cabe destacar que su reducido consumo no va en desmedro de la calidad de impulsor que funciona con suavidad y alcanza los 140 kilómetros por hora con total comodidad. Lo único reprochable es el trabajo de la caja de cambios que cuenta con un embrague automático que demora demasiado en pasar de una marcha a otra y hace notar una deceleración muy pronunciada.
Una aclaración ante tantas dudas de los curiosos que cruzamos en la calle, es que el vehículo cuenta con un motor de naftero de 1.0 litros con 84 caballos de potencia y no de uno eléctrico como cree más de uno.
Equipamiento
El equipo multimedia destaca una pantalla delantera multifunción con sistema touch y un reproductor de radio AM/FM con cargador para CD y MP3 con sólo dos parlantes que no suenan de la mejor manera. Además, está disponible: aire acondicionado con sensor de temperatura, encendido automático de luces y limpiaparabrisas, alzacristales y espejos retrovisores calefaccionados.
Confort
Partiendo de la base de que es un vehículo desarrollado para dos únicas personas, se destaca la gran comodidad para desplazarse dentro del habitáculo. Gracias a la terminación de toda la consola central a la altura de las rodillas se ha ganado un espacio valioso para los ocupantes.
Una característica del Smart es la dureza de la suspensión. Lamentablemente, es un punto en común de todos los modelos con una distancia entre ejes muy corta pero en las calles de Buenos Aires se ha notado con claridad todos los desniveles de asfalto.
Interior
La consola cuenta con una configuración más bien tradicional con una forma horizontal que no es cortada en ningún momento por un modulo vertical. El espacio para dos personas es realmente cómodo con terminaciones de calidad, un bonito tapizado de tela y el volante con terminaciones en cuero.
El tablero de instrumentos está divido en dos partes con un amplio velocímetro ubicado en el lugar tradicional y dos relojes en el centro de no tan buena visión (tacómetro y hora analógica). Lo más llamativo es la pantalla táctil de alta calidad que suministra el uso del estéreo, teléfono y GPS –no disponible en el vehículo testeado-, y se inclina para poder colocar los CD y conectar la tarjeta SD. A su vez, el dispositivo USB se inserta dentro de la guantera.
Capacidades
Este es unos de los puntos donde más trabajó la firma para poder ocupar todos los huecos disponibles. Son así los casos de las redes que se ubican detrás de ambas plazas y la guantera que es acompañada por porta objetos a los costados del cuadro de instrumentos. El baúl con una tapa de carga con apertura hacia abajo es pequeño, algo obvio en un automóvil de 2695 milímetors de largo, pero cumplidor para sus ocupantes.
Seguridad
El equipamiento de serie dispone de airbags frontales y laterales de torax y cabeza, el programa electrónico de estabilidad (ESP), servofreno hidráulico de emergencias y la ayuda de arranque en pendiente. Un punto muy completo para las capacidades de este modelo citadino.
Conclusión
El Smart For Two plasma varios de los requisitos que su cliente promedio busca. Con un llamativo glamour en su exterior e interior, un motor exacto y unas puntuales dimensiones, cumple los objetivos por lo cual fue desarrollado. En definitiva, su trabajo en la ciudad es perfecto.