Test: Mitsubishi Lancer Sportback Ralliart

Conduciendo.com probó este station wagon que equipa un poderoso motor de dos litros turbo cargado que alcanza los 237 caballos de potencia.

Pruebas | conduciendo | 23/11/2010 | Compartir

Salir al mercado con un modelo familiar deportivo no es lo más lógico. Para romper con esa lógica Mitsubishi lanzó a las ventas este vehículo con la denominación Sportback para encubrir que, en definitiva, es un station wagon deportivo. Conduciendo.com probó el automóvil y se dio el gusto de sentir que el modelo “Sportback” esta a la altura de las circunstancias.

El modelo, como lo dice el nombre, cuenta con un diseño sportback que es una combinación de un hatchback con station wagon. A su vez, cuenta con pequeños toque del modelo sedán pero con elementos deportivos adicionales: Como el spoiler delantero, el prominente alerón trasero, los faldones laterales, los grandes neumáticos, las aberturas de aire del capó y las agresivas ópticas del frontal.

En su interior, la primera fila de asientos también se refleja el diseño ultra deportivo con detalles en fibra de carbono, el tono oscuro en todas sus terminaciones, butacas recaro, el volante multifunción con las paletas de cambios y la consola central con líneas de un automóvil de carrera. A su vez, en la segunda mantiene las capacidades y comodidades del modelo sedán.

En cuanto a motorización, se destaca una experiencia totalmente atlética con el impulsor de cuatro cilindros turbo cargado de dos litros que desarrolla una potencia máxima de 237 caballos, unas 253 libras pies de par motor y demora unos 5.8 segundos para hacer el 0 a 60 millas por hora. A esta unidad se le acopla la transmisión SporTronic con doble embrague.

Lo que más se siente a la hora de conducir el vehículo es la diferencia de los tres modos de manejo que se puede elegir. El sistema cuenta con dos modos, el confort y el Sport, y a eso se le adhieren tres programas de funcionamiento: asfalto, gravilla y nieve.

Conduciendo.com se dio el gusto de sentir los 237 caballos de potencia a bordo del Mitsubishi Lancer Sportback Ralliart en todas sus formas de conducción. En definitiva, un modelo que es realmente divertido cuando se pone al volante en cualquier tipo de superficie.