Resultados diversos en Latin NCAP
La nueva Ranger de Ford obtuvo tres estrellas en protección para adultos y el Chevrolet Sail defraudó con la peor calificación.
La búsqueda de la seguridad debería ser uno de los objetivos primordiales para los fabricantes de autos. Mediante las pruebas de Latin Ncap, se evalúa el rendimiento de los diferentes modelos que llegan a América latina.
En los últimos test de impacto, se registraron dos resultados bastante adversos. La nueva Ford Ranger, que fue presentada a principios de este mes, logró tres estrellas en protección para pasajeros adultos y cuatro para niños. Si bien no es el puntaje ideal, se puede decir que la pick up aprobó el examen.
Pero hubo un resultado tan decepcionante como alarmante. El Chevrolet Sail, que no se vende en la Argentina, recibió cero estrellas para mayores y tres para menores.
El Chevrolet Sail es un sedán compacto muy popular en el mercado de América Latina y el Caribe. La unidad probada por Latin NCAP fue producida en China y ensamblada en Colombia.
La estructura de este vehículo fue catalogada como inestable y no es capaz de soportar cargas mayores. El conductor obtuvo lecturas de lesiones de riesgo de vida en la cabeza y en el pecho. El pecho del pasajero mostró compresión cerca del límite permitido, debido a la falta de airbags. Las lesiones del conductor explican las cero estrellas y por esta razón el impacto lateral no se llevó a cabo, ya que el resultado hubiese seguido siendo de cero estrellas en protección de ocupante adulto. El Sail ofrece anclajes Isofix para las sillas infantiles, por lo que en protección para niños salió ,emor puntuado y consiguió tres estrellas.
Por su parte, la recientemente renovadaFord Ranger, que se fabrica en la Planta de General Pacheco, alcanzó tres estrellas para protección de ocupante adulto y cuatro estrellas para protección de ocupante infantil. La pick up fue sometida a pruebas de impacto frontal y lateral y en ambos casos ofreció buena protección. Esta pick up también posee anclajes Isofix en las plazas traseras. Tal vez, la incorporación de un control de estabilidad le hubiesen permitido a la Ranger lograr las cinco estrellas.