Mazda Nagare Concept
La marca japonesa presenta el Nagare Concept con un diseño futurista basado en la idea de fluidez llevada a su máxima expresión.
Después de la presentación de los Mazda Sassou, Senku y Kabura, la marca japonesa no se dejó estar y presentó el todo nuevo Nagare Concept, con una imagen imponente y agresiva por donde se lo mire.
El Nagare resume el estilo que la marca pretende instalar en sus modelos a futuro. Líneas filosas y detalles como el del parabrisas, que llega casi a abarcar medio capot y se extiende como techo del vehículo. El espíritu conductor de Mazda será realzado e intensificado por Nagare, redefiniendo la idea de conducción sin perder la participación emocional.
La marca desarrolló claramente la intención de construir y vender, comenzando por estudiar el movimiento que tiene sobre el entorno natural: el viento, el agua, el sol y la lava que fluye de la ladera. El movimiento natural registra una impresión en su cerebro y eso es lo que esperan capturar.
El movimiento del vehículo es definido por la textura de su interior y superficies exteriores. Lo definen como "el concepto de un concepto". Nagare es la escultura sobre ruedas de coches Mazda que podrían parecerse en el año 2020.
Tiene el alma de un coche deportivo. Su forma es lisa y aerodinámicamente eficiente. Las ruedas son colocadas en las esquinas lejanas para la respuesta de dirección rápida y la maniobrabilidad ágil. Dos puertas de longitud doble proporcionan el acceso al interior de cuatro lugares que une adelante y encima como las alas de una mariposa. El asiento delantero central, que cuenta con una pantalla en su respaldo, y la apertura de puerta expansiva facilitan la entrada fácil al interior sorprendentemente espacioso.
La textura superficial proporciona el medio de visualizar el aire que fluye a lo largo y sobre el coche como ello se apresura por la atmósfera. La luz y la sombra se combinan para transportar este sentimiento de movimiento. Las insinuaciones similares de flujo fluido son evidentes en la capucha y arcos de rueda. La misma lengua superficial juega en todas partes del interior de Nagare: el panel de instrumentos, la consola de centro, y paneles de puerta. Todos parecen ser bajo la influencia del flujo.
El lateral presenta una escasa superficie vidriada que junto a las enormes llantas le otorga un aire robusto y musculoso. Posee ribetes que intentan reflejar el paso del viento. El volante es similar al de los aviones, con relojes en círculo y luz azul.
Inspirado en elementos de la naturaleza para captar el movimiento, la energía y la ligereza, cuenta con un motor rotatorio de hidrógeno y sorprendentes perfecciones. Sin vacilaciones, muy sofisticado y futurista.