Kia Sportage
Mejorado en varios aspectos, posee un buen motor y muestra buenas cualidades como SUV urbano.
El avance de Kia ha hecho refinar y mejorar sus productos. Ahora, la Kia Sportage -que comparte casi todo el diseño con el Hyundai Tucson- nos ha demostrado que aprendió algunas cosas de su hermano mayor y exitosos Sorento.
Por empezar, exteriormente muestra líneas de un pequeño SUV, pero con un diseño más acorde con los tiempos que corren.
La versión V-6 que manejamos nos ha sorprendido gratamente por su potente motor (173hp). Se desempeña muy suavemente y nos pareció muy apropiado para la conducción diaria en la ciudad ya que no es tampoco muy grande. Asimismo, por su tamaño creemos que le sobra motor para la utilidad que se le puede dar al vehículo y que, con el impulsor de cuatro cilindros que también se ofrece en la gama -si bien resulta menos potente con sus 140hp- gana en equilibrio con respecto al consumo de combustible. Claro, nunca está de más algo de potencia y, sobre todo, si haremos alguna actividad deportiva utilizado sus doble tracción. Pues mejor que sobre y no que nos falte motor a la hora de responder.
Por lo demás le hemos encontrado algunos aspectos buenos y otros mejorables, pero claro está que por su precio en los Estados Unidos no podremos achacarle demasiado teniendo en cuente que con entrega un fantástico SUV pequeño por un módico valor.
Sus mejores cualidades están en sus asientos de piel, el buen techo solar, el confort general sumado a un buen espacio interior. Al conducir se destaca su buena dirección, suave y de gran radio de giro, demostrando nuevamente que es ideal para la ciudad, dócil y fácil de conducir; es decir, apropiado para cualquier clase de conductor.
Su transmisión automática de 4 marchas también ofrece la opción secuencial, algo interesante por su precio pero innecesario para conducir este Kia que, por lo general, no será utilizada, además de no estar ubicada en la mejor posición como para divertirnos con ella.
Obviamente que tiene faltante de equipamiento de lujo, pero nada es fundamental. Creemos que el mayor esmero estará en rediseñar su consola central ya que es un poco pobre en calidad y estilo. También se debería mejorar unos pequeños aspectos del confort en las plazas delanteras como en agrandar espacio del cojín o un apoyabrazos que sea más elevado que el actual, ya que de este modo sólo se encuentra de vista porque no es posible apoyarse en él.
Por otro lado la marca coreana se ha esmerado en la seguridad, y es importante destacar que por el mismo costo estaremos bien resguardados por frenos a disco en las cuatro ruedas, ABS, control de estabilidad y tracción, indicador de presión en neumáticos y 6 airbags.
Ciertamente, el Kia Sportage es una muy buena opción para aquellos que buscan buen costo beneficio y sin dejar de tener un SUV, pero que sepan resignar algunos aspectos de confort, diseño interior y algo de calidad. Por lo demás, sobre todo su motor y manejo, creemos que es una buena opción citadina.