Focus: el modelo de Ford recibe una actualización
La cuarta generación del Ford Focus se ha renovado con ligeros cambios en su estética y nuevas motorizaciones.
En el Viejo Continente, la marca del óvalo muestra el restyling de un viejo conocido, el Ford Focus.
Ahora la cuarta generación se renueva en varios aspectos no sólo para su carrocería hatchback de cinco puertas sino también para su cuerpo familiar.
Respecto de su flamante look se aprecian cambios en su capó, en los grupos ópticos que incluyen LEDs de serie. También el logo ovalado ahora se aloja en la parrilla.
En el sector posterior del Ford Focus se han rediseñado los grupos ópticos que aportan un mayor grado de modernidad y frescura.
Una vez en el habitáculo presenta leves cambios aunque lo más trascendente es el arribo el flamante mecanismo multimedia SYNC 4.
De esa manera hace su aparición la pantalla de 13,2 pulgadas en el centro que permite el acople del Smartphone con Android Auto o Apple CarPlay.
Sobre el apartado mecánico el Ford Focus se encuentra con opciones diésel, de gasolina convencional o con hibridación suave.
Los primeros bajo la denominación EcoBlue consta de un 1.5 litros que puede desarrollar unos 95 o 120 caballos de fuerza.
Por otra parte, los de gasolina se inician con el 1.0L EcoBoost de tres cilindros que entregan unos 100 o 125 CV.
Con estas mismas propuestas combinado con el sistema EcoBoost Hybrid de hidridación ligera de 48 voltios permite erogar 125 o 155 CV.
La variante deportiva ST esconde el 2.3 litros de 280 caballos para los más puristas.
Todas estas variantes pueden trabajar en conjunto con una transmisión manual de seis relaciones o automática de siete u ocho marchas, según el caso.
Con todas estas novedades, el Ford Focus busca seguir vigente luego de tantos años de trayectoria.