Descubre a este clásico que se convierte en eléctrico
Una empresa británica revitaliza los icónicos Rolls-Royce de los años 70, transformándolos en vehículos eléctricos de última generación.
Con una arquitectura de 800V, baterías de alta capacidad y un diseño interior vanguardista, estos clásicos Rolls-Royce recuperan su esplendor gracias a un esquema cero emisiones.
Empresas como Evice, con sede en Reino Unido, apuestan por la conversión de vehículos emblemáticos en eléctricos, y ofrece una segunda vida a estos íconos del motor.
En este caso, el protagonista es el Rolls-Royce, un símbolo de lujo y elegancia que ahora se reinventa con tecnología de vanguardia.
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Evice ha puesto su mirada en los modelos Silver Shadow y Corniche de los años 70 y 80, dos joyas que han cautivado a generaciones de amantes del automóvil.
La compañía británica ha desarrollado un proyecto, denominado XP1, con el objetivo de transformar estos clásicos en vehículos eléctricos de altas prestaciones, manteniendo su esencia original.
Una de las claves de esta transformación radica en la elección de una arquitectura eléctrica de 800 voltios, una tecnología que reduce significativamente el peso del sistema eléctrico y permite cargas ultrarrápidas.
Además, esta configuración potencia notablemente el rendimiento, y eleva la potencia del Silver Shadow de los 220 CV originales a unos impresionantes 400 CV.
Para garantizar una experiencia de conducción placentera y sin preocupaciones, Evice ha equipado estos Rolls-Royce eléctricos con una batería de 77 kWh, que proporciona una autonomía real superior a los 320 kilómetros.
Esto significa que los propietarios podrán disfrutar de largos trayectos sin la necesidad de realizar paradas frecuentes para recargar.
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Pero la electrificación no solo se limita a la mecánica. Evice también ha prestado especial atención al confort y a la tecnología a bordo. Los modelos convertidos cuentan con aire acondicionado, sistema de audio de alta fidelidad, asientos eléctricos con calefacción y ventilación.
Se suma un sistema de info-entretenimiento con pantalla táctil compatible con Apple CarPlay. Además, se ha instalado una cámara de marcha atrás para facilitar las maniobras.
La suspensión también ha sido objeto de una puesta a punto. Evice ha desarrollado un sistema de suspensión activa que busca emular las sensaciones de la suspensión hidroneumática original, pero con una mayor precisión y un menor peso.
En cuanto a los frenos, se ha realizado una mejora para garantizar una frenada segura y eficaz.
Los Rolls-Royce eléctricos conservan el estilo clásico con una mecánica moderna que les permiten no perder su vigencia.
