Test: DS 3 Sport Chic Full LED
El tope de gama combina tres módulos LED con uno de xenón para incrementar su visión nocturna. Motor turbo de 156 caballos y un estilo de conducción totalmente deportivo.
La llegada de DS al país marcó el nacimiento de la firma de lujo de Citroën en Argentina. Con el paso del tiempo y algunos cambios de estrategia, esta marca se posicionó como una nueva «automotriz» y dejó de lado ciertos lineamientos de la compañía del doble chevrón. A pesar de esta divorció, los modelos de DS siguen teniendo algunos rasgos que te hace recordar que el vehículo pertenece al Grupo PSA.
El DS 3 Sport Chic Full LED, modelo que estuvo a prueba en Conduciendo.com, ya no lleva el nombre de Citroën en su diseño exterior pero en el interior mantiene el doble chevrón en el tablero de instrumentos. Estéticamente, puede ser que la línea cromada en la parte delantera formando la insignia sea lo único que quede de su «vieja» marca.
Su diseño exterior sigue siendo similar al de su antecesor. Entre los cambios más significativos se puede encontrar algunos retoques en los grupos ópticos delanteros que suman el sistema Led Vision que combina tres módulos de faros LED con uno de xenón para mejorar e incrementar el alumbrado nocturno.
El DS es diferente al resto. El exterior, el interior, las innovaciones tecnológicas y los materiales, hacen que se diferencie de los vehículos de las marcas generalistas. La bonita línea deportiva se completan con llantas de aleación que combinan su color con el techo y las carcasas de los espejos, los diversos apliques cromados, la salida de escape doble y el alerón trasero.
Ya sea por el volante con la superficie inferior achatada, la pedalera de aluminio, las butacas de cuero envolventes o la corta palanca de cambios; lo cierto es que la zona interior también remite a lo deportivo. La posición de manejo, que es baja y muy buena, se complementa con las regulaciones en altura de la columna de dirección y de las butacas. Como todo representante de su rubro, la luneta es pequeña, por lo que para ver lo que sucede detrás del DS 3 hay que apoyarse en demasía en los espejos laterales, que son de buen tamaño.
Tanto la existencia de un tablero de instrumentos de fácil lectura, como los asientos delanteros calefaccionables, el espejo interior antideslumbrante, los alzacristales delanteros, el climatizador automático, el control de velocidad crucero y los espejos exteriores eléctricos y rebatibles, son atributos de serie.
Para explotar al máximo sus 3,95 m de largo, 1,71 m de ancho y 1,46 m de alto, está dotado con un tablero que está sobreelevado para optimizar el espacio de las piernas. Teniendo en cuenta en el segmento que se ubica, el espacio trasero es correcto. Si bien no es fácil su acceso como en cualquier modelo de este tamaño, el espacio para las piernas supera lo esperado y permite que cuatro pasajeros se acomoden. Por su parte, el baúl ostenta un volumen de 285 litros, respetable cifra para su segmento, sobre todo, al saber que allí también se aloja la rueda de auxilio.
Uno de los puntos fuertes del DS 3 Sport es su conjunto mecánico. Gracias a su propulsor naftero de 1.6L e inyección turbo, que desarrolla una atractiva potencia de 156 caballos de fuerza y que se acopla a una transmisión manual de seis marchas, logra una velocidad máxima de 214 km/h y pasa de 0 a 100 km/h en sólo 7.3 segundos sin esfuerzos desmedidos.
Las sensaciones de manejo son buenas, y se fomentan en la estabilidad, la dirección asistida variable y el elevado ángulo de giro. Más allá de sus cualidades deportivas, puede adaptarse al uso diario sin necesidad de consumir grandes cantidades de combustible, de hecho, su gasto promedio supera los siete litros cada cien kilómetros. La existencia de un indicador de marcha en el medidor de combustible digital, contribuye al consumo medido.
Al DS 3 Sport no le pidas un confort de marcha de excelencia porque sinceramente no busco esa aptitud. Las suspensiones reguladas para un deportivo y la poca distancia entre ejes hacen que en ciudad se sienta que estas al volante de un karting. A decir verdad, Buenos Aires no ayuda a sentirse cómodo porque cuando no hay un pozo para esquivar, hay un lomo de burro para bajar la marcha.
Una de las grandes novedades del DS 3 Full LED está en el equipamiento del Active City Brake, el cual permite frenar el vehículo automáticamente para evitar los accidentes a menos de 30 km/h. El equipo de seguridad de complementa con: cuatro airbags, frenos ABS (antibloqueo), distribución de la fuerza del frenado electrónicamente (EBD), asistencia al frenado de emergencia (BAS), control de estabilidad (ESP) y de tracción (TCS), dirección asistida adaptable a la velocidad, asistente sonoro para el estacionamiento y ganchos ISOFIX. –ver ficha técnica–
El confort también es un punto atractivo del modelo. Equipa alzacristales eléctricos con one touch para el conductor, climatizador automático, encendido automático de luces y limpiaparabrisas, control de velocidad crucero, espejos exteriores rebatibles eléctricamente, volante multifunción y navegador. –ver ficha técnica–
El DS 3 Full LED Sport Chic es un vehículo para un reducido grupo de clientes que busca un automóvil que lo haga especial. Los 156 caballos de potencia en este «pequeñin» lo vuelven un deportivo con todas las letras. A su vez, su configuración está pensada para ser un modelo atlético y poco importa el confort de marcha en ciudad.
Los $473.897- que hay que gastar (gracias al bendito impuesto) hacen que el DS 3 Sport sea un vehículo que sólo lo buscarán «sus» clientes. Esos clientes que saben lo que van encontrar y con el paso del tiempo estarán cada vez más convencidos de tener su DS 3.