Kia también renovó el Soul
El flamante “crossover urbano compacto” de la firma surcoreana se ofrece en el país con una estética más moderna y en dos variantes que se diferencian, principalemente, por su transmisión.
Al mismo tiempo que se efectúa la renovación del Cerato, Kia también suma al portafolios local la nueva generación del Soul, un modelo que conjuga las cualidades estéticas y deportivas de los hatch más modernos de cinco puertas, con las características de espacio y robustez de los SUV compactos.
Antes de comenzar con la redacción de esta noticia, en el grupo de trabajo de Conduciendo.com surgió un interrogante, ¿contra quien compite el Soul? Si bien recién mencionamos que se ubica en medio de los hatchback y los SUV más pequeños, y la mismísima marca lo define como un crossover urbano compacto; podríamos decir que, de acuerdo las gustos y necesidades del cliente, podría entrar en una comparativa tanto con la Ford EcoSport, la Renault Duster y la Chevrolet Tracker; como con el nuevo Ford Focus, el Chevrolet Cruze, el Citroën C4, el Peugeot 308 y el Renault Megáne III.
Fuera de la segmentación, y ya centrándonos en el nuevo modelo surcoreano que ingresa al mercado argentino vale destacar que se ofrece con una motorización naftera MPI de 1.6 litros y 124 caballos que puede acoplarse tanto a una caja manual de seis velocidades como a una automática de igual cantidad de marchas.
Estéticamente muestra una carrocería más amplia que la de su antecesor, pero lo que se ve más deportiva y atractiva a la vez. Sus medidas actuales son 4.140 mm de largo (antes era de 4105 mm), 1.800 de ancho (1785 mm), 1.600 mm de alto (1610 mm) y 2570 mm de distancia entre ejes (2550 mm). Esto también se traduce en un habitáculo más espacioso.
En lo que a equipamiento y tecnología se refiere, ya sea la opción manual como la automática disponen de dirección eléctrica, control de velocidad crucero, volante con regulación en altura y profundidad, sistema de audio con CD-MP3, USB, Bluetooth, volante multifunción y una pantalla táctil con cámara de retroceso. En cuanto a seguridad, las dos también llevan frenos ABS con discos en las cuatro ruedas, doble airbags frontal, ganchos ISOFIX y faros antiniebla delanteros y traseros.
Donde sí hay diferencia, más allá de la transmisión, es en que la variante automática añade techo panorámico y climatizador automático.
Al país llega importado desde Corea de Sur, con valores que inician en los 29.300 dólares y con una con garantía de 5 años o 100.000 kilómetros.