Citroën C4 Aircross, se completa el triunvirato

La firma del doble chevrón francés se sube, por primera vez, al segmento de los todoterreno con un ejemplar de aspecto moderno, de origen japonés, y que pondera la seguridad.

Novedades | conduciendo | 10/10/2013 | Compartir

Tras las apariciones del Mitsubishi Outlander Sport y del Peugeot 4008, finalmente Citroën lanzó al mercado nacional al C4 Aircross, su SUV compacto que le permite ingresar al segmento de los 4×4. Si bien la compañía ya incursionó en este rubro en el mercado europeo desde mediados de la década pasada con el C-Crosser; lo cierto es que gracias a la alianza desarrollada entre Mitsubishi y el Grupo PSA Peugeot-Citroën; ahora tiene la posibilidad de incorporar a su portafolios argentino un ejemplar de tracción completa y así incursionar en un mundo que hasta ahora no era viable económicamente.

Desde la misma automotriz aclaran que el objetivo de este modelo es “consolidar la firma Aircross” en el país. Así como dentro de la vitrina Citroën figura la gama DS, con vehículos de carácter premium; también está la Aircross, la cual agrupa a los ejemplares que intentan conjugar las cualidad de un todoterreno con la agilidad y comodidad de un citadino. El primer representante de esta sección fue el C3 Aircross.

De hecho, es tan clara la intención de la firma de utilizar al C4 Aircross como “trampolín de imagen”, que tienen proyectado un total de ventas de 600 unidades al año, ya que lo considera un vehículo de nicho. Más allá del Outlander Sport y el 4008, sus competidores más directos son la Honda CR-V, la Toyota Rav4, los Jeep Patriot y Compass; el Hyundai Tucson, la Chevrolet Captiva, el Kia Sportage, el Volkswagen Tiguan, el Ford Kuga y el Renault Koleos.

La mecánica es la misma que montan sus hermanos de Mitsubishi y Peugeot, un propulsor naftero de 2.0L y 16 válvulas que genera 150 caballos de potencia y 196 Nm de torque. Puede acoplarse tanto a una caja manual de cinco marchas que traslada el poder hacia el eje delantero (4×2); como a una automática CVT de seis velocidades que puede repartir la fuerza en los dos eje (4×4). La máxima virtud de esta última opción es que de acuerdo a las necesidades del conductor, hay tres modos de uso: el 2WD, donde sólo traccionan las ruedas delanteras; el 4WD, donde se reparte de forma automática el reparto de par entre el tren delantero y el tren trasero; y el “Lock”, recomendado para las superficies de poca adherencia (nieve, arena, barro, etc.) y que equipara la tracción casi al 50:50 entre ambos ejes.

A pesar de estas características, vale la pena aclarar que su rendimiento está preparado para afrontar de manera más que satisfactoria los caminos y calles de la ciudad, y los trazados off-road livianos; dado que no es un verdadero pura sangre del off-road.

En lo que a diseño se refiere, a pesar de que el C4 Aircross -al igual que el 4008- deriva del Outlander Sport, sólo comparten el techo, el parabrisas y las cuatro puertas. El estilo de Citroën se deja ver a través de una zona frontal con luces de LED verticales en las rejillas aerodinámicas, una parrilla amplia frontal cromada, intermitentes integrados en los retrovisores, ópticas traseras con una guía de luz inspiradas en el Hypnos Concept, embellecedores cromados inferiores y en el portón; y llantas de aleación de 18 pulgadas. Los detalles off-road del exterior son los pasos de rueda bien marcados, los cortos voladizos y las protecciones para los bajos de la carrocería.

En la cabina se destaca la posición de conducción sobreelevada, el gran techo panorámico acristalado que dispone de guías LED que iluminan el habitáculo en la noche y un interesante espacio que le permite viajar a cinco pasajeros adultos con total comodidad. El volumen de baúl es de 416 litros.

Sin quitarle importancia al confort y la tecnología, lo más relevante en cuanto a equipamiento que ostenta el C4 Aircross se ubica en el sector de seguridad, donde de serie equipa siete airbags (frontales, laterales, cortina y rodilla), frenos ABS con repartidor de la fuerza de frenado y ayuda al frenado de emergencia; controles de estabilidad y tracción; asistencia al arranque en pendiente, dos ganchos ISOFIX para anclar las sillas de los más chicos en las plazas traseras y sensor trasero de estacionamiento.

Los precios para las dos versiones que se comercializan en el país son de 273.400 (4×2) y 316.700 (4×4), respectivamente. La variante 4×2 automática está programada para los primeros meses de 2014. La garantía es de tres años o 100 mil kilómetros.

En definitiva, con la aparición del C4 Aircross no sólo queda marcado el cierre de un triunvirato de modelos que comparten plataforma y características mecánicas, sino que además enmarca el ingreso de otra automotriz generalista al segmento de los 4×4.