Renault Clio RS 200 EDC, potencia en envase chico
La flamante variante más radical de la gama del reconocido compacto francés dispone de una carrocería de cinco puertas y modificó su motor para obtener mayor fuerza y menores gastos.
Poco despues de la presentación de la cuarta generación del Clio, Renault da a conocer en el Salón Internacional de París la nueva gama del RS, el compacto de mayor rendimiento de la familia que buscará imponerse dentro del segmento de los deportivos.
La principal diferencia con sus antecesores es que este ejemplar abandona la propulsión atmosférica para hacerse de un motor turboalimentado de 1.6 litros que se acopla a una transmisión automática de doble embrague y seis velocidades que se puede accionar desde las levas tras el volante. Si bien el impulsor al que reemplaza (de 2,0L) también producía 200 caballos de fuerza, en esta nueva edición se aumentó el par hasta los 240 Nm (25Nm más).
Gracias a su renovada mecánica, donde también se dejó de lado la caja manual, el consumo de combustible se redujo en dos litros cada 100 kilómetros y las emisiones de gases contaminantes bajaron en un 25%.
Mediante el accionar de un botón, se puede elegir entre varios modos de conducción: Normal, Sport y Race. Según cual de ellos se elija, se acentúa la respuesta del motor, del pedal del acelerador, de la caja de cambios, del control de estabilidad y de la dirección.
Al igual que sus antepasados, el nuevo RS permite optar por dos tipos de suspenciones, por un lado está el chasis Sport, donde se conjugan las caracatrísticas deportivas con las del uso cotidiano; mientras que por el otro figura el chasis Copa, ideado para la competición. Éste último está 5 milímetros más cerca del suelo y ofrece una rigidez un 15% mayor. A través del sistema R-Sound Effect, se puede adaptar el sonidos del motor según los gustos del cliente.
Por fuera, más allá de respectar el ADN del Clio IV, ofrece las características propias de los deportivos, puesto que incorpora un frontal mucho más agresivo en donde se destacan el paragolpe delantero totalemente renovado y trasero con difusor integrado, el logo de Renault de gran tamaño ubicado en el centro de la parrilla y acompañado de las siglas RS, luces LED de circulación diurna, extensiones de las aletas, llantas de 17 o 18 pulgadas y doble tubo de escape. Otro punto imporante es que dejó de tener una estructura de tres puertas para disponer una de cinco, por lo que su superficie acristalada aumentó.
En el interior, donde las terminaciones en rojo se imponene, los elementos son dignos de un automóvil de alta gama, ya que figuran el sistema multimedia con pantalla táctil de navegación, radio con Bluetooth, conectividad USB, manos libres, ayudas al conductor, control de clima automático. Tanto la tapicería de cuero como los sensores de estacionamiento con cámara trasera.
Su primer lugar de destino será el Viejo Continente.