Ford y la renovación de un sedán que sigue vigente
La actualización del Ford Mondeo exhibe un diseño renovado, un interior más funcional y una oferta mecánica optimizada, en un contexto en el que China se convierte en el último bastión global para este modelo.
En un escenario donde Ford ha reorientado su catálogo internacional hacia camionetas, SUVs y modelos de alto valor simbólico, el Mondeo emerge como una excepción significativa.
Con la salida del Focus en Europa y la desaparición progresiva de berlinas en mercados occidentales, el Mondeo encuentra en China el territorio donde la marca todavía invierte en su continuidad.
La actualización presentada en el Salón del Automóvil de Guangzhou confirma esa apuesta. El Mondeo 2026 empezará a venderse de inmediato y se consolidará como un producto exclusivo para China, aunque también aparece en algunos mercados de Oriente Medio bajo el nombre Taurus.
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Diseño exterior: un lenguaje más cohesionado y expresivo
Aunque el Mondeo no estrena plataforma ni replantea su concepto general, los cambios implementados en su carrocería son suficientes para otorgarle una presencia distinta respecto a su antecesor.
La modificación más evidente se observa en el frontal. Las ópticas adoptan un formato único y continuo que reemplaza las unidades divididas anteriormente utilizadas.
La eliminación de la franja lumínica frontal, que en el modelo anterior atravesaba toda la parte superior del paragolpes, permite un diseño más sobrio.
En tanto, el perfil conserva la silueta fastback y mantiene las manijas de puertas ocultas. También se suman flamantes llantas de 21 pulgadas con acabado bitono. El techo en color negro se mantiene como opción lo que aporta un look más deportivo.
Ya en la zona posterior, los grupos ópticos conservan su contorno, aunque los patrones internos cambian para ofrecer un dibujo lumínico más refinado.
Por último, la oferta cromática se expande con dos tonos específicos (Rojo Carmesí y Azul Océano).
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Un interior dominado por la tecnología, con atención renovada a la ergonomía
El habitáculo del Mondeo ya se distinguía por la presencia de un panel digital que recorre gran parte del tablero, y esta actualización 2026 refuerza ese enfoque.
Nos encontramos con la pantalla panorámica 4K de 27 pulgadas que sigue siendo el corazón tecnológico. Actúa como centro de comando para funciones de infoentretenimiento, navegación, conectividad y configuraciones.
A su lado se ubica un cuadro de instrumentos digital de 12,3 pulgadas, integrado visualmente en la misma superficie acristalada.
Claro que la verdadera novedad aparece en la zona inferior de las salidas de aire centrales. Ford incorpora controles físicos destinados a funciones de uso frecuente, como la climatización y la gestión de determinados accesos rápidos. Estos mandos, que combinan botones y rodillos, corrigen una de las críticas más frecuentes al diseño previo, donde casi todas las operaciones se ejecutaban desde la pantalla táctil.
El rediseño de la consola central introduce un cargador inalámbrico de doble superficie, una solución pensada para un mercado donde la utilización simultánea de dos smartphones en un mismo vehículo es habitual.
A esto se suma una evolución del sistema SYNC+ respaldada por un procesador Qualcomm de nueva generación.
Esta plataforma suma capacidades de aprendizaje, actualizaciones inalámbricas más amplias y un asistente de voz con mayor precisión contextual.
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Gama motriz: eficiencia y potencia sin abandonar la tracción delantera
Sobre este apartado, el Ford Mondeo mantiene su foco en motorizaciones orientadas al balance entre eficiencia y respuesta.
La oferta arranca con un motor turbo de 1.5 litros que alcanza 193 caballos de potencia. Un escalón por encima se ubica un propulsor turbo de 2.0 litros con 257 CV.
Asimismo, las opciones de combustión cuentan con una transmisión automática de ocho velocidades.
La gama también incluye una variante híbrida que combina un bloque de 1.5 litros con un sistema eléctrico que permite alcanzar 284 caballos en total. En este caso, la transmisión corresponde a una CVT.
En todas las configuraciones, la tracción se mantiene en el eje delantero. Aunque el mercado chino muestra un creciente interés por los sistemas híbridos enchufables y eléctricos, Ford apuesta aquí por un portafolio que privilegia la confiabilidad y un costo de producción competitivo.
