Mercedes-Benz SLS AMG

La tecnología en su máximo esplendor es la característica principal del renovado súper deportivo alemán.

Concept | conduciendo | 11/09/2013 | Compartir

El nuevo vehículo súper deportivo de la firma alemana, en conjunto con AMG, deslumbra con su paquete de tecnología sin precedentes, con aperturas de puertas del tipo Ala de gaviotas, un motor de alto rendimiento y un diseño puro, distintivo y apasionado, que reinterpreta a la famosa e impresionante Mercedes-Benz 300SL. Por primera vez, los alemanes y AMG presentan en el Mercedes-Benz SLS AMG el chasis y la carrocería de aluminio, esto lleva a un ahorro de peso considerable con respecto al acero tradicional utilizado en otros vehículos.

Pero sin dudas, lo que más llama la atención de su exterior es la apertura de puertas de abajo hacia arriba, que Mercedes-Benz denomina tipo «Ala de gaviota», que le dan un carisma incomparable. Sin embargo, no sólo la abertura de puertas recuerda a la 300SL, la parrilla con la estrella grande y los flancos traen a la memoria el legendario vehículo deportivo. Además, el largo capó, la parte trasera corta con el alerón y la larga distancia entre sus ejes le dan un aspecto más ancho y agresivo. La ingeniería de la aviación proporcionó la inspiración de los diseñadores para realizar el interior del Mercedes-Benz SLS AMG. Lo característico, es el tablero de instrumentos cuyas superficies dan la sensación de anchura, como su exterior. En concordancia con un avión, el centro de la alargada consola metálica es de color mate y la palanca selectora de la caja de cambios se asemeja a la del control de empuje de una aeronave.

A pesar de la baja posición de los asientos, la amplia altura que alcanzan las puertas garantiza el fácil ingreso y egreso de la cabina. Por su parte, el corazón de la SLS AMG es un potente ocho cilindros, 6.3 Litros V8 que desarrolla 571 caballos de fuerza y produce 650nm de par. El mismo envía su fuerza a las ruedas traseras a través de una transmisión de doble embrague Speedshift de siete velocidades, que origina un cambio rápido y cuenta con cuatro modos de configuración. Estas prestaciones le permiten al Mercedes-Benz SLS AMG alcanzar una velocidad máxima limitada electrónicamente en 317km/h, llegar a los 100Km/h saliendo de parado en sólo 3.8 segundos, y quizá algo elevado es el consumo de combustible, ya que requiere de 13.2 litros para recorrer 100 Km. Donde sí se hace fuerte Mercedes-Benz es en materia de seguridad de los viajantes, puesto que el Mercedes-Benz SLS AMG integra los niveles más altos para el resguardo pasivo y activo de los ocupantes, con cinturones pretensores de tres puntos y limitador de fuerza y ocho airbags.

Un lujo más para Mercedes-Benz con este SLS AMG de particular e innovador diseño, que seguramente capte la atención por su apertura de puertas, su casi interminable capó y por sus innumerables atributos que lo hacen de primera clase.